Terminando mal

Hoy jugaron en el Staples Center el Trueno de Oklahoma City que le daba una visita a los Laguneros de Los Ángeles. El partido desde el comienzo mostraba una ventaja para los visitantes jóvenes, que se encontraban aprovechándose de los pedantes y, al parecer, desinteresados Lakers.

Los angelinos han perdido, contando este partido, cinco partidos seguidos y lo peor es que faltan dos juegos para acabar la temporada y uno de ellos es contra el mejor equipo de la Liga, y para rematar, de la misma conferencia: Los San Antonio Spurs.

Afortunadamente, a pesar de sus grandes y muy malas derrotas que han padecido los californianos, siguen en la posición del segundo sembrado, aunque empatados con Dallas en tal posición, y tan sólo a un juego de ventaja sobre el recién victorioso Thunder.

Yo soy un gran seguidor y fanático de los Lakers, y por lo mismo, me molesta esta situación tan vergonzosa y falta de interés, o al menos la efectividad, por ganar. Espero que el enfrentamiento que tendrán contra los grandes tejanos les motive para no volver a perder en lo poco que resta de la temporada regular y entrar a la postemporada con los motores ya bien encendidos y una efectiva participación como el equipo bicampeón que son.

¡Ánimo mis Lakers!
Yo sé que posiblemente no terminen siendo el mejor equipo del oeste, pero hay que tomar el control de cada partido.

Recordemos el desempeño que tuvieron nuestros archienemigos bostonianos el año pasado, no siendo el mejor equipo de la postemporada y llegando a la serie final contra los angelinos, llegando a un espectacular e inolvidable séptimo juego y casi logrando ganar el campeonato en Los Ángeles.

Verdaderamente los Lakers deben tomar a los Celtics del año pasado como ejemplo y mejorar en cada serie, demostrando sólo así quién es el campeón.